Capítulo dieciséis.

{Narra Louis.}

Me desperté a las once y media. Me dolía la cabeza. Me levanté de la cama y bajé a la cocina para desayunar. Al bajar, me encontré a Niall sentado en el sofá mirando la televisión. 

-Hey. - saludé.
-Dios, que dolor de cabeza. - se quejó.
-Buenos días a ti también. 
-Lo siento. - se disculpó. Me reí.

Me dirgí a la cocina para buscar alguna pastilla para el dolor de cabeza. Me asusté al entrar.

-Por dios, ¿qué te ha pasado, Andrea? - tenia una cara horrible y el pelo enmarañado.
-Yo.. nada, déjalo.- me dijo levantándose y yéndose. 
-¿Estás segura de que no te pasa nada? - ella solamente asiente. 

¿Qué le habrá pasado? Lo tengo que averiguar. Al cabo de unos minutos, los demás bajaron. 
Empecé a hacer tostadas y café para todos.

-¿Habéis visto a Andrea? - preguntó Ashlyn. 
-Sí, hace un momento estaba aquí. No se que le pasa, pero estaba fatal. - Ash suspiró. 
-Voy a buscarla. 
-Voy contigo. - dijo Harry. 

{Narra Andrea F.}

Después de que Louis me viera, me dirgí a mi habitación a buscar ropa para darme una ducha. Cogí unos pantalones pitillos, una camiseta de la bandera de inglaterra con un hombro descubierto y las vans negras. 
Me fuí al baño y entré a la ducha. Estuve pensando en lo de ayer. Suspiré. Salí de la ducha y me vestí. Al salir, ví que Ashlyn y Harry estaban buscando algo. Harry alzó la vista y me vió. Lo que me faltaba. No quería verlo. 

-Ashlyn, está aquí. - gritó Harry. 
-¿Qué? - contesté borde. 
-Te estábamos buscando. - contestó él.
-Pues aquí estoy, os podéis ir. 
-¿Se puede saber que te pasa? 
-Nada. 

Pasé por su lado y bajé a la cocina.

-Buenos días. - les saludé.
-Buenos días. 
-Andrea, ¿cómo estás? - me preguntó Zayn.
-¿Eh? Ah, bien, tranquilo.. - le sonreí débilmente. Vino a mi lado y me abrazó.
-Sabes que me puedes contar lo que sea, ¿verdad? - me susurró.
-Gracias. - le abracé.
-Bueno, yo me voy a dar una vuelta. - digo. 
-¿Dónde? - me preguntó Shei.
-No lo sé. - me encogí de hombros. - Solo necesito tomar un poco de aire. 
-Vale. Ten cuidado. - me sonrió Cris. 
-Sí, tranquila. Adiós chicos. 

Subí arriba a por las gafas de sol, mi móvil, el ipod, los auriculares y la cartera. Estaba dispuesta a salir cuando me topé con alguien.

-¿Me puedes decir por qué estás tan borde? - me preguntó Harry cogiéndome por los hombros.
-No te importa. - le sonreí falsamente. - Ahora suéltame, tengo que irme.
-No hasta que me digas que te pasa. - es irritante. Suspiré.
-Será mejor que me dejes. - me zafé de sus brazos y me dispuse a salir. 
-De aquí no te vas hasta que me digas que coño te pasa. - dijo enfadándose.
-Que te lo diga la rubia con la que te morreabas. - le sonreí falsamente. - Adiós. - cerré de un portazo. Suspiré. Necesitaba tomar un largo paseo. Me puse los auriculares y encendí el ipod. Puse aleatorio. Comencé a caminar, no tenía rumbo ninguno. No sabía donde iba. Al final terminé en un parque. Me senté en un banco y me quedé observando como los niños jugaban y los padres de estos conversaban entre ellos. No se como ni cuando una niña pequeña se acercó a mi. 

-Hola. - me dijo con una voz dulce.
-Hola cielo. - le sonreí. 
-¿Quieres jugar conmigo? - me preguntó. 
-Claro -le contesté. - pero, ¿estás tu sola? - pregunté.
-No, he venido con mi hermano. - me sonrió. Que mona. Le sonreí.
-Bueno, ¿a que quieres jugar? 
-Allí - me señaló la caja de arena. 
-Vamos. - me levanté y le dí la mano. Me la cogió y nos fuimos a la caja de arena. 
-Oye, ¿cómo te llamas?
-Me llamo Andrea, ¿y tú? 
-Arianne. 
-Vaya que nombre más bonito. 
-Gracias. 

Seguimos jugando, y hicimos un pequeño castillo. Mientras que estaba llenando el cubo de arena, alguien nos interrumpió.

-¡Arianne! ¿Se puede saber dónde te habías metido? - dijo alguien.
-Estaba jugando con mi nueva amiga. - me giré. 

No podía ser. Él no. Seguía igual de hermoso que siempre. Con su pelo rubio, ojos azules y una sonrisa hermosa. 

-¿Luke? ¿Eres tú? - pregunté asombrada mientras me levantaba. 
-¿Andrea? - me sonrió. - ¡Cuánto tiempo! - me abrazó. 
-Te he echado muchísimo de menos. - susurré.
-Oye, pero no llores, tonta. - me abrazó más fuerte. 
-Te fuiste sin despedirte. - me separé y le pegué. 
-No quería hacerte daño.. - se incomodó. 
-Da igual, es pasado. Déjalo. - le abracé. 
-¿De que os conocéis? - habló la voz de Arianne. 
-Antes eramos muy amigos. - le contesté con una sonrisa. 
-Arianne - dijo Luke - nos tenemos que ir. 
-Quiero quedarme. - dijo.
-No podemos, dijo mamá que a las siete te llevara a casa. 
-Está bien. - suspiró la pequeña. 
-Oye Luke, - me miró.- ¿Quieres venir a ver a las chicas? Te acompaño a dejar a tu hermana. - le sonreí.
-Oh, claro. Me encantaría volver a verlas. - me dijo. 

Nos encaminamos hacía la casa de Luke. Durante el camino nos fuimos contando todo lo que nos había pasado durante todo este tiempo que no nos habíamos visto. Llegamos a casa de Luke, y la pequeña llamó al timbre.

-Luke, te tengo dicho que cojas las llaves cuá.. - paró. - ¡Andrea! ¡Cariño mío! - me abrazó.
-Hola. - susurré sonriendo. 
-¡Cuánto tiempo! ¿Qué tal estás? ¿Y tus padres, cómo están? - me preguntó.
-Muy bien. - sonreí. - Mis padres están en España, estoy aquí con las demás chicas, ya que nos dieron la beca para venir a estudiar aquí. - le informé. 
-¡Oh, me alegro tanto de verte! - me abrazó otra vez.
-Oye mamá. - dijo Luke - ¿puedo ir a ver a las demás chicas? - preguntó.
-Claro, hijo. - contestó. - pero no llegues tarde. 
-Liz, - la llamé. - ¿Podría quedarse a cenar? 
-Claro. - me sonrió. 
-Bueno, nos tenemos que ir. - dijo Luke. 
-Ha sido un placer haberte vuelto a ver, querida. - me dijo Liz. 
-Igualmente, Liz. - la abracé. - Espero verte pronto. 
-Yo también. Adiós. - sonrió. 
-Adiós. - dijimos los dos en unisono.

Emprendimos camino hacía la casa de Zayn. En todo el camino no podía parar de reír. Luke era tan gracioso. Le había echado tanto de menos. 
Llegamos a casa de Zayn, y le dije a Luke que se quedara allí, hasta que le diera una señal. Este asintió. Pasé adentro y fui al salón. Allí estaban todos sentados en el salón hablando animadamente.

-Hola. - dije. Todos se giraron. 
-¡Andrea! - se levantaron las chicas para abrazarme. 
-Ya, ya, parad. Me estáis quitando la respiración. - dije riendo.
-¿Se puede saber dónde te habías metido? - dijo Louis. 
-Bueno, me fui a tomar un poco el aire y me topé con alguien. - sonreí.
-¿Con quién? - me preguntaron todos.
-Chicas, adivinadlo vosotras. - dije y en ese instante apareció Luke. 
-No puede ser. - dijeron y se abalanzaron sobre él. No podía parar de reír. Algunas estaban llorando y las otras no le dejaban respirar. 
-Lo vais a matar. - dije. Se separaron de Luke. - Oh, bueno os presento. Luke, ellos son Louis, Zayn, Niall, Liam y .. - suspiré.- Harry.
-Encantado. - dijo sonriendo. 
-Igualmente. - dijeron los cuatro, ya que Harry no emitía sonido alguno. 
-¿Os importa que se quede a cenar? - pregunté.
-¡Claro que no! ¡Cuántos más, mejor! - dijo Niall. Los chicos se fueron al jardín a jugar fútbol, mientras que nosotras nos sentamos en las hamacas del jardín mientras charlábamos con Luke. 

-¿Y cómo os topastéis? - preguntó Cris. 
-Pues, su hermana vino y me pidió jugar con ella y este - señalé. - después de unos minutos vino. 
-¿Tienes una hermana? - preguntó Ashlyn.
-Sí. - contestó Luke. 
-Aw, ¿cuántos años tiene? - preguntó Shei.
-Cuatro. 
-Luke, eres un caso perdido. Dejas sola a tu hermana y la dejas hablar con una desconocida. - dije negando con la cabeza. - Eres un caso perdido. - reí.
-¡Oye! que me dijo que fuera a comprarle golosinas, y se fue. 
-Lo que decía, eres un despistado. - le saqué la lengua. 
-A ver quien es el despistado cuando te tire al agua. - dijo levantándose y acercándose a mi. 
-No, no me toques. -dije riendo levantándome. 
-Eso lo veremos. Sabes que te voy a tirar igualmente, así que no huyas, cobarde. - lo miré incrédula. 
-¡Uh! - se oyó por parte de las chicas. Comencé a correr y Luke detrás. No podía parar de reír y por eso no podía correr. De repente, siento que me levantan del suelo. Me giro y veo que es Luke, el que me lleva sobre su hombro. Empecé a gritar y patalear. 

-¡Luke! -grité riendo. - ¡Bájame ahora mismo! 
-¿Quién es la despistada ahora? - dijo aproximándose a la piscina. 
-No, Luke, porfavor. - dije. Miré hacía la dirección de las chicas, dónde se les habían unido los demás, y se estaban riendo. - No le encuentro gracia ninguna. - grité. - ¡Ayudarme! - Luke ya estaba en el borde de la piscina. 
-¡Venga, contar conmigo! - dijo Luke dirigiéndose a los demás. - ¡Una! - gritaron. - ¡Dos! y ¡Tres! - me soltó. 

Salí a la superficie y los vi a todos riendo, menos a Harry, quién me miraba fijamente. Aparté la mirada. Busqué a Luke y lo fulminé. 

-¡Luke, me las pagarás! - dije molesta. 
-Oh, venga, si solo a sido una bromita. - dijo haciendo un puchero. Salí de la piscina y mi ropa chorreaba. 
-Después de tanto tiempo sin vernos, y tu me tiras al agua. ¡Genial! - dije.
-Venga no te enfades. - me abrazó. - Si sabes que te quiero mucho. 
-Si, si. Me voy a ducharme. - entré dentro y me dirigí a mi habitación. Cogí la ropa y entré al baño para cambiarme y arreglarme el pelo. Al terminar, salí y me encontré a Harry sentado en la cama. 
-¿Qué haces aquí? - pregunté un tanto borde.
-Tenemos que hablar. - dijo seriamente.